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In the last decade, Venezuela has quickly become a hub for Russian and Chinese cyber technologies in the Western hemisphere. In an effort to expand its grip on power, the Maduro regime in Caracas has allowed the country to become a laboratory for digital surveillance and authoritarian social control. Moscow and Beijing are thus able to project their global ambitions into the Western hemisphere by sending their cybersecurity know-how and infrastructure to Venezuela. In other words, it’s a win-win exchange for both sides as they carve out an anti-American cyber partnership in Latin America. By Benjamin R. Young. Full Text ->The NationalInteres
Traducción de cortesía -> En la última década, Venezuela se ha convertido rápidamente en un centro para las tecnologías cibernéticas rusas y chinas en el hemisferio occidental. En un esfuerzo por ampliar su control sobre el poder, el régimen de Maduro en Caracas ha permitido que el país se convierta en un laboratorio de vigilancia digital y control social autoritario. Por lo tanto, Moscú y Beijing pueden proyectar sus ambiciones globales en el hemisferio occidental al enviar su infraestructura y conocimientos de ciberseguridad a Venezuela. En otras palabras, es un intercambio en el que ambas partes ganan, ya que forjan una asociación cibernética antiestadounidense en América Latina
Traducción al español -> Google Translación
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