Carl Von Clausewitz, reconocido militar prusiano, una vez sentenció que «la guerra es la continuación de la política por otros medios». Esta aseveración es ilustrativa para comprender que la praxis política es una dinámica permanente de actores que luchan entre sí por la toma del poder. Por tanto, quien pretenda permanecer en el poder debe tener claridad de conocer al adversario y usar las estrategias necesarias para debilitarlo. De eso sabe muy bien los que han detentado las riendas del Estado venezolano por más de 23 años, gracias a la asesoría de expertos foráneos en estrategia militar a quienes pagan mucha suma de dinero. No es casual que han sido exitosos en pruebas comiciales, a pesar de haber condenado a la miseria a millones de venezolanos y ser minoría electoral. Están claros en el viejo axioma «divide y reinarás». Mientras su adversario luce desorientado, desunido y desconectado de los reales problemas sociales. Por Jesús Alberto Castillo. Texto Completo-> RevistaSIC

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El país languidece y ni el régimen ni la oposición han sido capaces de avanzar en sacarlo de ese infierno (Almagro dixit), pues las evidentes contradicciones de cada grupo y la polarización entre ellos paralizan la búsqueda de soluciones consensuadas.

Por Alfredo Michelena

El régimen de Maduro vive en una montaña rusa, argumentábamos en mi artículo anterior. Decíamos que esta alianza delincuencial en el poder que domina a Venezuela, o “pranato”, no ha podido concitar un consenso interno más allá de mantenerse asido al poder. Los diferentes grupos que predan de las riquezas y potencialidades de Venezuela lo hacen desordenada y contradictoriamente, guiados cada uno por el provecho de corto plazo. Por esto, el régimen fracasa una y otra vez en alcanzar los objetivos de desarrollo que propone. Los ejemplos son abrumadores, desde los motores de desarrollo hasta la limpieza del rio Guaire, pasando por el abatimiento de la inflación.

Lo grave es que este comportamiento también lo observamos en la oposición. Sórdidas batallas se libran a diario entre los atomizados grupos opositores al régimen, que solo tienen en común llegar al poder, para lo cual deben sacar a Maduro.

A pesar del discurso bien intencionado de muchos y el desprendimiento y arrojo indiscutible de otros, no logran articular una estrategia consensuada más allá de la retórica antichavista y de los lugares comunes de las denuncias.

La oposición ha tenido indiscutibles éxitos políticos que no se han podido consolidar por la mezquindad que reflejan. Recordemos cómo se logró conquistar el parlamento, para perder ese poder, en la imposibilidad de consensuar una estrategia común. O la concreción de un gobierno interino con reconocimiento internacional que hace aguas. Y pare Ud. de contar.
“Los políticos venezolanos le deben a su pueblo soluciones, …, le deben mucha probidad republicana”, nos dice Luis Almagro, Secretario General de la OEA, al ver estas coincidencias, en lo que él describe como “un infierno sin salida”.

¿Qué nos pasa?

Este despelote “bilateral” nos hizo recordar algo que escribió Alexis de Toqueville en la primera de la “Cartas sobre la situación interior de Francia” escrita en 1843, donde se refiere al “mal francés”. Allí nos dice: “… la virtud política apenas existe entre quienes … gobiernan, y … la ambición de estos, su oportunismo y su egoísmo casi nunca tienen otros límites que los impuestos por la opinión pública. ¿Opinión pública en Venezuela? Y agrega “… los gobernantes [ y agregaría los dirigentes]… no son sino lo que la nación les obliga a ser; y es sobre todo a ella a la que deben atribuirse sus debilidades y sus vicios.” Es decir, son reflejo de la sociedad en que viven.

¿Será que así somos los venezolanos?, y se cumple aquello de que “tenemos el gobierno [y los dirigentes] que nos merecemos”. ¿Es el mal venezolano?

En todo caso, debemos recordar que en Venezuela existen y han existido hombres probos, gobernantes y dirigentes con virtud política, muchos de los cuales, por cierto, no son tan queridos por las masas, que prefieren las “virtudes” populistas de los demagogos que endulzan sus oídos. Pero los que han llegado al poder nos han dejado grandes contribuciones en nuestro desarrollo.

En esa misma carta, Toqueviile se refiere a esa Francia, que ya había pasado por su revolución y estaba saliendo de la Primera República, y la caracteriza diciendo que “Una pusilanimidad y un letargo universal se han adueñado de esta nación, tan audaz y viva”. ¿Será que de esto también sufre Venezuela?

Guaidó’s popularity has dropped from about 60% three years ago to under 15% in February, according to the the Venezuela-based polling firm Datanalisis. That’s because many believe he lacks a viable way to oust Maduro, who has held power since 2013, said David Smilde, senior fellow at the Washington Office on Latin America and professor at Tulane University. By Regina Gracía Cano. Full Text ->abcNews

Traducción de cortesía -> La popularidad de Guaidó ha caído de alrededor del 60% hace tres años a menos del 15% en febrero, según la firma de encuestas Datanálisis, con sede en Venezuela. Eso se debe a que muchos creen que carece de una forma viable de derrocar a Maduro, quien ha estado en el poder desde 2013, dijo David Smilde, investigador principal de la Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos y profesor de la Universidad de Tulane. Traducción al español -> Google Translación

Durante la concentración del 12 de febrero, con motivo del Día de la Juventud, que convocó la oposición, el presidente interino Juan Guaidó presentó una agenda de acción, denominada “Salvemos a Venezuela”.

 La mencionada agenda está orientada a lograr elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas lo más pronto posible.

A esos fines propuso, primero superar el estado de resignación que parece haber arropado a muchos, para lo cual hace un llamado a retomar el trabajo de organización así como el de movilización popular.

En lo internacional planteó por una parte centrarse el apoyo al proceso que se le sigue a Maduro en la Corte Penal Internacional y  por la otra, aumentar el nivel de coordinación de la acción internacional.  Recordemos que luego de la renuncia de,  Julio Borges, “Canciller” del gobierno interino, no ha habido una figura pública que asuma esa responsabilidad.

Como tercer punto presentó la necesidad de retomar el proceso de negociación en México, del cual el régimen de Maduro se retiró en noviembre pasado, poniendo como excusa el apresamiento por parte de EE.UU. del empresario colombiano, Alex Saab, quien es considerado el testaferro de Nicolás Maduro y al que se le sigue juicio en ese país norteño por conspiración en el lavado de uS$350 millones.

Finalmente,  y a fin de fortalecer la unidad propuso una elección de base para escoger los abanderados del movimiento democrático venezolano. Un movimiento que ha estado signado por las divisiones internas.

Y todo esto dentro de un proceso de consulta abierta con los venezolanos y los distintos grupos de la sociedad civil y las organizaciones políticas democráticas. By OnVenezuela

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Guaido, the former speaker of Congress who is recognized by Washington and its allies as Venezuela’s rightful leader, said on Monday that the opposition needed to “rebuild itself” after the disappointing result.“Today a new phase is opening,” he said, without providing specifics. “Today is a time for reflection amongst our leadership… It is not the time for fights nor egotism among political leaders.”Analysts said ahead of the vote that the opposition’s late decision to participate and in-fighting over whether it should run candidates would damage its showing. By Vivian Sequera and Mayela Armas. Full Text -> U.S.News

TRaducción de cortesía -> Guaidó, el ex presidente del Congreso que es reconocido por Washington y sus aliados como el líder legítimo de Venezuela, dijo el lunes que la oposición necesitaba “reconstruirse” tras el decepcionante resultado. “Hoy se abre una nueva etapa”, dijo, sin proporcionando detalles. “Hoy es un momento de reflexión entre nuestros líderes … No es el momento de peleas ni egoísmo entre los líderes políticos”. Los analistas manifestaron antes de la votación que la decisión tardía de la oposición de participar y las peleas internas sobre si debería presentar candidatos perjudicaría su actuación.

Amid a pandemic and ongoing food shortages, politics isn’t exactly the top priority for many Venezuelans. But fresh divisions within the country’s opposition are likely to have significant repercussions on how the coalition engages with the Nicolas Maduro regime. On this week’s podcast, AQ’s Brian Winter spoke to The Washington Post’s Ana Vanessa Herrero about the opposition’s changing dynamics and diverging plans. Podcast Access -> AmericanQuarterly

This past Monday, Maduro agreed to a major amnesty, releasing from prison, or dropping charges against, 110 opposition politicians. As part of a deal quietly brokered by Turkish diplomats, he asked a substantial proportion of the opposition to break with Guaidó and participate in legislative elections the regime will hold in December. That vote will be neither free nor fair. The regime has taken legal control of the leadership of all the main opposition parties, meaning Maduro himself will have the final word on who is allowed to run against him. By Francisco Toro . Full Text -> TheWashingtonPost