Nicaragua’s ambassador to the Organization of American States denounced his own country as a dictatorship Wednesday in a dramatic and unprecedented speech during an online conference at the Washington, D.C.-based hemispheric organization. He then apparently quit his post. Ambassador Arturo McFields, who last year was named envoy to the OAS, said he was speaking on behalf of thousands of public servants in Nicaragua who are afraid to speak their minds for fear of losing their jobs. He also invoked the nearly 200 political prisoners and more than 350 people killed, most by state security forces, since massive protests in 2018 that shook the government of President Daniel Ortega. By José de Córdoba. Full Text -> WSJ
Traducción de cortesía -> El embajador de Nicaragua ante la Organización de los Estados Americanos denunció a su propio país como una dictadura el miércoles en un discurso dramático y sin precedentes durante una conferencia en línea en la organización hemisférica con sede en Washington, DC. Luego aparentemente renunció a su puesto. El embajador Arturo McFields, quien el año pasado fue nombrado enviado ante la OEA, dijo que hablaba en nombre de miles de servidores públicos en Nicaragua que temen decir lo que piensan por temor a perder sus trabajos. También invocó los casi 200 presos políticos y más de 350 personas muertas, la mayoría a manos de las fuerzas de seguridad del Estado, desde las multitudina.rias protestas de 2018 que sacudieron al gobierno del presidente Daniel Ortega.
Traducción al español -> Google Translación
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