Jorge Rodríguez, quien buscó el poder para vengar el asesinato de su padre -líder guerrillero en los años setenta- opera junto al presidente, dividiendo a la oposición y confundiendo a los países que esperan una apertura democrática del chavismo. Rodríguez, aliado importante de Nicolás Maduro, podría ser su posible sucesor. Es psiquiatra y, ha desempeñado un papel relevante en confundir a la oposición y a las entidades internacionales que esperan una apertura democrática en Venezuela. Su influencia comenzó en 2003 como director del CNE, jugando un papel fundamental durante varias elecciones. Ha ido ocupando cargos de mayor posición e influencia, llegando a ocupar el cargo de vicepresidente, y actualmente de presidente de la Asamblea Nacional. Su hermana Delsy Rodríguez es la actual vicepresidente de Venezuela, mostrando la influencia de la dupla Rodríguez. Su reputación de identificar los errores de la oposición y generar ventajas políticas lo convierte en una figura divisiva en Venezuela, y alguien que podría liderar la transición cuando Maduro renuncie. Rodríguez ha jugado un papel decisivo en la construcción de la narrativa de que su gobierno es un grupo de demócratas asediados por una oposición violenta, y su objetivo ha sido aliviar al gobierno venezolano de su responsabilidad por crímenes de lesa humanidad. Ha sido el gran negociador del gobierno. Logró la liberación de Álex Saab, y ha sido cabeza gubernamental de las diferentes negociaciones con la oposición, incluyendo los acuerdos de Barbados, lo que demuestra su importante influencia en la política regional. Sin embargo, los críticos sugieren que la cruzada política de Rodríguez carece de la benevolencia que prometió inicialmente, ya que su gobierno mantiene un catálogo de prisioneros políticos, persigue a sus opositores y ha provocado una estampida migratoria y una crisis de refugiados que afecta a la región. A pesar de sus maniobras políticas, las ambiciones de Rodríguez podrían no extenderse hasta la presidencia misma, según algunas fuentes. Ver texto original por Sinar Alvarado en -> El País
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